9.- REALIDAD.....


Así es que me senté a esperar su llegada. Y los pájaros cantaron dulces melodías de luz vespertina. Y esperé. Y las hojas doradas por el otoño, cayeron mansamente sobre la tupida alfombra de hierba. Y me acomode entre las raíces de un arce descansando mi espalda en su áspera corteza. Y el árbol me acarició. Pero yo estaba dormida y no me dí cuenta. Entonces Dios trono y su relámpago cruzo los cielos y una voz profunda me dijo: ¿Qué esperas?. Conteste entonces. Espero a mi Dios. Y los truenos sonaron cual carcajadas lejanas: Llevo aquí todo el día llamándote pero estabas dormida.
Perdóna si no te atendía. Escuche los trinos de los pájaros. Observe la caída de las hojas. Y acabé durmiendo en este árbol oyendo el murmullo del arroyo. Hasta que tu trueno me ha despertado.